El té blanco es conocido por su aroma fresco y floral, con notas sutiles de hierbas y frutas. En un perfume, esta nota puede agregar una sensación de limpieza y pureza, perfecta para textiles como toallas y ropa de cama.
Lo que me encanta del té blanco en perfumes textiles es que es una nota muy ligera, pero aún así puede tener un gran impacto en la experiencia del usuario. Cuando usas una toalla o ropa de cama con aroma a té blanco, sientes una sensación de frescura y tranquilidad que es difícil de encontrar en otros aromas.